sábado, 23 de febrero de 2008

RECORDANDO


- ¿Que hacemos niño? ¿Lo cogemos o no?

- No, no espera, ya veras como suben.

Pasaron unos tres meses, cuando le hicieron una nueva oferta. Efectivamente, habian subido. Aún asi , le dije:

- Volveran a subir . Espera.

Y esperó. Casi medio año mas. Y volvieron a subir.

- Ya está bien. Acepta y descansa.

Y aceptó. Y se jubiló.

Dos años y medio despues, murió. De cancer. De puto cancer de pulmón.

Si lo llego a saber le digo que se retire la primera vez. Todo eso de vida que se hubiese llevado. El puto cancer se llevó a mi padre.

Desde entonces descansa.


Salió de casa, para ir trabajar. No llegó. Se quedó en la carretera. Otro conductor con prisas le embistió de cara. No se enteró. Dejó mujer y dos niños. Tampoco se enteraron. No sabian que habia pasado. Ella , de golpe , se quedó sin marido, sin pareja, sin compañero. Los niños , que no entendian nada, no volvieron a ver a su padre. Él perdió la vida. O se la quitarón.

La carretera. La puta carretera se lo llevó. Era como un hermano.

Desde entonces descansa.


Queria volver. A trabajar. Decia que le ayudaria. Yo no le entendia. Otros compañeros decian que si. Que le iria bien. Y volvió. Y trabajó. Con su "bolsita" colgando. Todos intentabamos disimular. Y tratarlo como a cualquier otro. Era dificil. Su lento caminar. Su respiración entrecortada. El tiempo se detenia cuando iba al servicio. A cambiarse el "paquete", como él decia. Le ayudamos. Como podiamos . Hasta que , en un "cambio de aceite", ( que buen humor tenia) no volvió. Estaba peor. Ya no regresó. Lo demas fuimos al hospital. No tenia ganas de reir. Lógico. Yo fuí dos veces. No tube tiempo para mas visitas. Murió. Otra vez el cancer, se lo llevó. El puto cancer. Era mi compañero. Mi amigo. Tenia 31 años.

Desde entonces descansa.


Yo tenia 17. El 19. Yo trabajaba por la mañana y estudiaba por la tarde. El, trabajaba todo el dia. Los martes y jueves, entrenabamos. El domingo partido. Y por la tarde, a bailar. Me venia a buscar a casa. Me hacia reir. Como pocos. Como muy pocos. Yo notaba que le gustaba estar conmigo. El sabia , que para mi , era especial. Y tanto que lo sabia. Un martes , no vino a entrenar. El jueves supimos porqué. Fué trabajando. En la obra. Un error en la sujección de un palé, hizo que cayera . Y lo hizo encima suyo. No se enteró. Tampoco se enteró. Murió. Con 19 años. Al domingo siguiente, jugamos con brazalete negro. Un minuto de silencio. Un puto minuto de silencio.

Desde entonces descansa.


A mi hermano Antonio.

A mi compañero Jordi.

A mi amigo Victor.

A mi padre. Especialmente a mi padre.

Y a todos aquellos que se han ido quedando por el camino.


No os olvidamos.


P.D. Lo siento pero esta vez , no se que me parece.

1 comentario:

Johnny Tastavins dijo...

La vida es un soplo Conan. Me dan rabia los días perdidos, los días en que "no pasa nada", los días en que pienso en dejar las cosas para mañana. Y es un error. Tenemos fecha de caducidad, unos antes, otros después. Es un hecho, no podemos luchar contra él. Pero sí podemos VIVIR, y recordar, y disfrutar. Y de eso se trata, de disfrutar de los buenos momentos, no privarse de las pequeñas cosas que le dan sabor y placer a la vida. Y de la compañía de los que queremos. Hoy les tenemos. ¿Y mañana? Pues eso, hoy con ellos y por ellos.

A la mierda con la prevención, con el miedo, con el ay ay ay.

Bello recuerdo el de tu padre, dicen que nadie muere del todo mientras alguien que le conociera siga en vida y recordándolo. No te puedo rebatir una línea de lo que has escrito.

¡Carpe diem!