Lloré cuando nació. Como un niño. A última hora , surgieron problemas. Lo hizo con cesarea. Todo salió bien. Pero lloré. De alegria. El nudo en la garganta se quedo durante muchos dias.
Con poquitos años, empezó a recibir clases de danza. En su primera función pública ,parecia un pequeño patito , intentando mantenerse recta sobre su diminuto pie. Las lágrimas volvieron a salir. De alegria. De la risa. De la emoción.
Ya en colegió, se apuntó a basket. Como el resto de sus compañeras era malisima. Tardaron no se cuantos partidos en meter su primera canasta. Pero la metió. Empezaba a ser cabezona. Y al final lo consiguió. La metió. Tuvo que ser ella. Jugadoras, banquillo, entrenador, padres y madres , aún lo estabamos celebrando cuando el equipo contrario habia vuelto a encestar. Pero nos daba igual. Habiamos conseguido meter una canasta. Parecia que habiamos logrado la champions. Perdimos 64 a 2. ¿Y que? Por supuesto lo celebramos, Menuda fiesta. Los demas padres me felicitaron. Habia sido mi hija. La mejor. Orgullo absoluto. El nudo solo me dejaba sonreir.
Hizo la comunión. Yo desde lo alto de la iglesia, como el resto de padres, la grababa con mi super camara de 8 mm. Cuando leyó su parte, empece a verla borrosa por el visor de la cámara. Estaba llorando. El nudo en la garganta no me dejaba respirar. De reojo miré al resto de padres. No dije nada, pero estaba claro que de todas y todos la mia era la que mejor habia leido. Y la que más guapa estaba. No separé el ojo del visor de la cámara. Tampoco hacia falta que los demas me vieran. A la mayoria ni los conocia . Con disimulo me soné los mocos y seguí con mi ojo pegado al visor.
Estudió. Y lo hizo tan bien que se graduó. Ya es licenciada. Cuando recogio su merecido premio, el puñetero nudo de la garganta volvió a subir. Yo creia que ya no volveria a aparecer. Pero ahi estaba . Disimulé otra vez.
Ahora ya sé, que cada vez que me haga sentir orgulloso, el nudo volverá. Y con el nudo , el disimulo. O no. Ya se verá.
A mi me parece que siempre tendre que llevar un pañuelo. Por si acaso.
3 comentarios:
He visto la foto y digo "Pues si me suena"...
Que bonito todo eso del orgullo. Seguro que hay más momentos de pañuelo, así que no lo dejes lejos.
Gracias.
Mis abuelas decían que a las plantas si les hablabas y les dabas cariño mientras las regabas estaban más bonitas y duraban mucho más.
Cuando la dedicación hacia un hijo/a es plena, estas ahí con ellos, en su educación, estudios, formación, crecimiento, amistades (novios, sí Conan que la niña crece)el orgullo es recíproco, aunque para eso tienes que crecer un poquito, porque en la adolescencia no estas para pijadas.
Cuándo llevaba greñas y chupa de cuero, mi padre me aleccionaba, me decia: "cuando seas mayor diras, qué razón tenia mi padre". En aquel momento pensaba, "vaya taladrada del viejo", hoy puedo decir con ORGULLO que razón tenia.
Ahora que incluso llega el momento de ser padre, leyendo tu espacio en la red, secundo tus palabras Conan, también se me cae la baba e incluso tengo que mocarme.
P.D. Felicidades Haro, hija de Haro.
Supongo que a todos nos pasa igual. Entendemos la sabiduria de los mayores cuando nos hacemos mayores.
Conservaremos el pañuelo. Para cuando vuelva la baba y el moco. ¿Verdad Mario?
PD: Aunque lo del novio, cuesta. Cuando seas mayor diras, " que razón tenia Conan".
Un abrazo.
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